El Hospital Universitario Francesc de Borja de Gandia ha adquirido nuevo equipamiento para mejorar la asistencia en la sección de Cardiología. Se trata de un ecocardiógrafo de gama alta, un ergoespirómetro y diez aparatos de monitorización continua de electrocardiograma (Holters), que permitirán la incorporación de nuevas exploraciones en la cartera de servicios.
El ergoespirómetro se utiliza para realizar pruebas de esfuerzo para el diagnóstico de pacientes con cardiopatía isquémica (familiarmente conocido como angina de pecho), guiar el tratamiento tras un infarto de miocardio y evaluar pacientes con síntomas durante el esfuerzo, entre otros usos.
Además, este aparato permite la realización de ergoespirometría con intercambio de gases para el diagnóstico y pronóstico de pacientes con insuficiencia cardiaca avanzada, valvulopatías con criterios límite para cirugía y también para la evaluación de pacientes con hipertensión pulmonar, que anteriormente debían realizarse en otros centros hospitalarios de referencia, evitando así desplazamientos y listas de espera.
En el caso del nuevo equipo para realizar ecocardiografías, además de realizar el procedimiento estándar, permite la realización de ecocardiografía de estrés, estudio de la deformidad del miocardio (Strain) y estudio con contraste para aquellos pacientes que necesitan estudios más específicos y que anteriormente no se les podía realizar en el Hospital Universitario Francesc de Borja.
Tal y como destacan desde el área de Cardiología, una de las ventajas que ofrece la ecocardiografía de estrés es la de poder realizar diagnósticos específicos en pacientes con claustrofobia a los que no se les puede realizar una resonancia magnética de estrés.
En este nuevo aparato se ha incorporado además una sonda para ecografía transesofágica con software para obtener imágenes en 3D. La sonda, además de ser más flexible y aportar comodidad al paciente cuando se le realiza la técnica, adquiere imágenes en tres dimensiones que son muy útiles a la hora de programar reparaciones valvulares por parte del equipo de cirugía cardiaca.
Esta técnica también se realizaba en el Hospital Clínico de Valencia, con lo que, de nuevo, se consigue evitar desplazamientos innecesarios, listas extra de espera y molestias a los pacientes del departamento de salud de Gandia.