El VI Circuit de Curses Populars Safor-Valldigna (2023-2024) ha concluido con éxito de participantes. Con la Volta a Benirredrà, el circuito dio por finalizada una edición que ha servido para seguir consolidando el evento y creando unión entre los runners.
Más de 1.200 corredores inscritos y cerca de 40.000 espectadores siguieron el circuito a lo largo de sus decenas de kilómetros repartidos entre 18 carreras.
El interés despertado entre el público resulta evidente, por este motivo, Som Safor ha conversado con uno de los organizadores, Kike Moragues, para que haga balance sobre esta edición, que ha resultado ser un éxito.
- ¿Cuál ha sido el balance del Circuito de la Safor de este año 2024?
El balance interno ha sido muy positivo. No hemos tenido aplazamientos, ha transcurrido todo como pensábamos. En unos días vamos a pasar unas encuestas a los corredores para que ellos y ellas puedan evaluar el circuito y muestren su conformidad o disconformidad en distintos aspectos. Es muy importante que nos propongan cosas a mejorar, para poder ir aplicándolo en próximas ediciones e ir mejorando con los años. Cuando tengamos las opiniones de todos los participantes, ya podremos tener el balance global de este año 2024 y empezar a trabajar en la próxima edición.
- ¿Cuáles han sido los datos de participación de esta edición?
En cuanto a las inscripciones, que se hacía en una única para todo el circuito, este año hemos batido récord, con 1.235 inscripciones. En cuanto al alcance de corredores durante todo el circuito, ha sido de, aproximadamente, unas 7.000 personas.
Estamos muy contentos también porque ha crecido de manera notable la participación de la mujer. En la primera edición el porcentaje de mujeres era de un 15 %, mientras que este año ha sido de un 30 %. Estamos muy felices por este dato, pero queremos seguir mejorando para conseguir al menos el 50 % de participación mujeres en las carreras y poder ser un circuito totalmente paritario.
- Cuéntanos sobre la Gala Final.
La Gala Final es un evento sobre todo para los premiados, los que han obtenido los tres primeros puestos de cada categoría. También se premia a los que han participado en todas las carreras -18 en total-, pero a los que han hecho más de 12 también se les da un premio.
Al finalizar los premios, se hace un pequeño vino de honor para celebrar todos juntos el éxito, un año más, del Circuito de la Safor. Es una gala sencilla, pero que crea un sentimiento de unión y les gusta mucho a los corredores.
El circuito tiene varios objetivos, uno de ellos es crear unión haciendo deporte. Consideramos que tenemos un compromiso social de crear vínculos de gente que no se conocía de nada y que terminan siendo amigos gracias a este evento.
- ¿Nos puedes avanzar novedades para la próxima edición?
Todavía es un poco pronto, porque queremos tener en cuenta las valoraciones que hagan los corredores, para poder mejorar de cara al año que viene. En cualquier caso, vamos a seguir en la misma línea: trabajando mucho en lo que hay que mejorar y aplicando las propuestas de los participantes, siempre que sea posible.
- ¿Cómo ha evolucionado el Circuito de la Safor en estos años?
Desde que empezamos en 2016, con 500 inscripciones, hasta ahora, el circuito ha mejorado mucho. Sí que es cierto que, la primera edición se hizo de forma bastante rápida, porque era un reclamo de la población de la comarca. Año a año hemos ido evolucionando hasta alcanzar el éxito que se tiene ahora.
Además, el circuito también ha avanzado mucho en compromiso social y en la dinamización de la comarca. Se ha convertido en uno de los eventos comarcales más importantes, no quiero decir que sea el más importante, pero sí que es cierto que atrae a corredores a todos los municipios y eso lo hace muy potente.
Por último, me gustaría agradecer a los patrocinadores, que hacen que este circuito pueda ser cada vez mejor y además que sea «low cost». Estamos hablando de que 18 carreras cuestan 40 euros.
También agradecer a los organizadores de cada carrera, que se vinculan de una manera muy agradecida y, sobre todo, a los corredores, que al final son los que nutren el evento y los que tienen paciencia ante cualquier cambio que pueda ocurrir.